¿Qué es la toxoplasmosis ocular y cómo se trata?

La toxoplasmosis ocular es una infección causada por el parásito Toxoplasma gondii, que puede afectar la retina y otras partes del ojo. Los síntomas incluyen visión borrosa, enrojecimiento, dolor ocular, sensibilidad a la luz y la aparición de manchas en la visión. La toxoplasmosis puede ser congénita o adquirida a través de la exposición a heces de gatos infectados, carne cruda o mal cocida y agua contaminada.

El tratamiento de la toxoplasmosis ocular generalmente incluye una combinación de medicamentos antiparasitarios y antiinflamatorios para reducir la inflamación y eliminar el parásito. En casos severos, puede ser necesaria la cirugía para reparar el daño en la retina.

Si experimentas síntomas de toxoplasmosis ocular, consulta a tu oftalmólogo para un diagnóstico y tratamiento adecuados. La atención temprana puede prevenir complicaciones y preservar la visión.